En el contexto de regulaciones ambientales cada vez más estrictas a nivel mundial, el reciclaje de plumavit se ha convertido en un eslabón clave dentro de la cadena productiva pesquera.
Para los comerciantes de pescado, las cajas de espuma de poliestireno expandido (EPS) usadas se acumulan en los almacenes, ocupando mucho espacio y afectando las operaciones diarias y la gestión sanitaria.
Lo más grave es que, al entregar estos residuos a terceros para su enterramiento, los costos son muy altos —un comerciante mediano gasta en promedio unos 5000 euros al mes— y además se genera contaminación secundaria, con el riesgo adicional de multas por incumplir las normas ambientales.

Por eso, muchos comerciantes de pescado han comenzado a enfocarse en cómo construir su propio sistema de reciclaje de poliestireno.
Con una sola compactadora de poliestireno, todos los problemas de residuos de espuma pueden resolverse directamente en el origen. Esta máquina comprime y reduce el volumen del material, y el poliestireno reciclado resultante puede venderse directamente a recicladores para su reutilización, reduciendo significativamente los costos de transporte y logística.
Dado que las cajas de pescado provienen de restaurantes, supermercados y puertos, el sistema de recolección es complejo. Además de procesar eficientemente sus propios residuos, GreenMax busca ayudar a los negocios a abrir nuevas fuentes de ingreso, por lo que desarrolló una compactadora de poliestireno móvil montada en vehículo.
Esta máquina de poliestireno expandido puede operar directamente en los almacenes o muelles, realizando una compresión y reducción rápida de las cajas de plumavit, disminuyendo hasta 50 veces el volumen de almacenamiento y mejorando notablemente la eficiencia del reciclaje de plumavit.

Su uso flexible ofrece dos modelos de ganancia para los inversionistas:
Modo de operación itinerante: mover la compactadora de poliestireno montada en vehículo a los almacenes de diferentes comerciantes de pescado y cobrar según el volumen procesado. De esta forma se resuelve el problema de reciclaje de poliestireno de los negocios cercanos y se convierten los residuos en recursos reciclados rentables.
Modo de alquiler: arrendar la máquina a los comerciantes y cobrar una tarifa diaria o mensual.
El poliestireno reciclado comprimido tiene menor volumen y mayor densidad, y puede venderse directamente a GreenMax o a recicladores locales a un precio de mercado aproximado de 540 euros por tonelada. En uno o dos años, se puede recuperar la inversión de la máquina de poliestireno expandido, generando después ingresos sostenidos del reciclaje de plumavit.

A diferencia de otros residuos de espuma, las cajas de pescado absorben mucha agua y hielo durante su uso, lo que afecta el proceso de fusión térmica; por eso, no son adecuadas para equipos de termofusión.
La compactadora de poliestireno con tornillo móvil de GreenMax utiliza tecnología de extrusión física y anti-fusión, lo que permite deshidratar y reducir el volumen al mismo tiempo, garantizando un material comprimido uniforme, de alta densidad y sin rebote.
Esta tecnología es especialmente adecuada para las plantas procesadoras de pescado, mercados de mariscos y puertos pesqueros, donde se requiere un reciclaje de plumavit eficiente en entornos de alta humedad.

Optar por un sistema propio de reciclaje de poliestireno no solo reduce significativamente los costos operativos y de gestión de residuos, sino que también cumple con las políticas de la Unión Europea y de los gobiernos locales sobre el uso circular del poliestireno reciclado.
Con una compactadora de poliestireno móvil, los comerciantes de pescado pueden convertir los desechos en recursos valiosos, logrando una verdadera economía circular en la pesca sostenible.
GreenMax — especializado en soluciones de reducción y reciclaje de espuma y plásticos, hace posible que cada caja de plumavit vuelva al ciclo de reutilización.
